Si queremos saber más sobre los signos de fuego del horóscopo deberemos tener ciertos conceptos básicos sobre la astrología. La astrología fue uno de esos primeros campos del conocimiento de la antigüedad en la que el fuego estaba presente como elemento primordial. Considerados por unos como simple superchería, pero elevado a la categoría de ciencia por aquellos estudiosos que la defienden, trata de adivinar los sucesos venideros a través de las interacciones entre constelaciones, planetas y los cuatro elementos fundamentales: el aire, el agua, la tierra y el fuego.
De aquí nacen los conocidos horóscopos, con sus doce signos zodiacales. Tanto si crees que todo esto es pura farsa y engaño como si piensas que hay algo de verdad, no encontrarás a casi ninguna persona que no sepa cual es el signo del zodiaco que le corresponde por su fecha de nacimiento (curioso, ¿verdad?)
Nosotros también somos curiosos por naturaleza, y si se trata del estudio del fuego en cualquiera de sus vertientes, no podíamos pasar por alto el tema de los signos de fuego del zodiaco.
¿Cuáles son los signos de fuego del horóscopo?
El fuego, junto con la tierra, el agua y el aire, es una de las triplicidades de la astrología. Los tres signos de fuego del horóscopo son Aries, Leo y Sagitario. Aunque son muy diferentes entre sí, el elemento común que los une les otorga ciertas similitudes.
Se dice que las personas que tienen uno de estos signos de fuego poseen una gran capacidad de seducción y una personalidad muy marcada. El temperamento y la perseverancia son cualidades intrínsecas de este elemento.
Esto significa que los signos de fuego tienen mucha confianza en sí mismos, pero también una tendencia a ser individualistas y rechazar la colaboración de terceros. Por otro lado, son muy inteligentes, resolutivos y entusiastas, lo que les permite dejar su huella a donde vayan y motivar a otros a emprender nuevos caminos.
¿Qué significa ser de un signo de fuego?
Las personas nacidas bajo un signo de fuego se caracterizan por ser gente emprendedora, activa y entusiasta. El mismo elemento ya se ha categorizado como pasional de por sí. Sin embargo, cada uno de los tres signos tienen sus matices.
Aries es el primer signo del Zodíaco. Todos los nacidos entre el 21 de marzo y el 20 de abril son de este signo de fuego. Se simboliza por una cabeza de carnero y su planeta regente es Marte. Su signo opuesto es Libra. En la mitología griega, Aries se asocia con la famosa historia del vellocino de oro y el viaje de los argonautas.
Las personas Aries suelen ser ardientes, impulsivas e individualistas. Siempre están listos para abrir nuevos caminos y luchar por el cumplimiento de sus sueños. Son unos apasionados por las causas constructivas y ponen todo su empeño en su consecución. A veces, esa impulsividad se torna en impaciencia, ya que gustan de obtener resultados de manera rápida, cosa que no siempre es posible, lo que puede llegar a causarles frustración y desánimo.
Leo es el quinto signo del Zodiaco. Las personas que nacen entre los días 23 de julio y 23 de agosto tienen el signo de Leo. Un cabeza de león es el símbolo de este signo de fuego, que está regido por el mismo astro Sol. Tiene como opuesto a Acuario y en la mitología clásica su figura se ve representada por el mítico León de Nemea, a quien Heracles ( Hércules) le dió muerte como uno de sus conocidos 12 trabajos.
A los nacidos bajo este signo de fuego se les asocia un talante afectuoso y generoso. Son carismáticos, divertidos y exuberantes, como el Sol. La cara más oscura de los Leo puede llegar a mostrar aspectos agresivos, pues son muy competitivos y, como todos los signos de fuegos, el individualismo puede tornarse en egocentrismo si se pierden los papeles.
Ocupando el noveno lugar del Zodíaco, tenemos a Sagitario, el tercer y último signo de fuego. Rige la vida de aquellos nacidos entre los días 23 de noviembre y 21 de diciembre. El símbolo es representado por un centauro armado con arco y flechas y su regente es Júpiter. Sagitario se opone a Géminis y en la mitología griega es representado en la leyenda del bondadoso y sabio centauro Quirón.
Este signo de fuego es el más completo de los tres. Las personas marcadas por ese signo zodiacal se caracterizan por ser audaces e inquisitivas. Su meta en la vida es conocer la verdad sobre nuestra existencia. Son curiosos por naturaleza, alegres e incluso emanan cierta inocencia infantil, que en situaciones de negatividad puede desembocar en ira y rudeza.